He vuelto

He buscado, contraído, la versatilidad de mi derrota, y he sentido el placer de desaprender. Ahora vuelvo, con el calor de un claro mensaje.

6:58 AM

profetizo la magia de mi ser. Nada puedo hacer contra ello. La arrogancia parece temblar al terminar. Lo mío. Lo propio. Cada parte nace de sí mismo. Eso es lo que parecemos creer. La superficie siempre tiene las mejores rocas. Son perfectas en sí mismo. ¡Si alguien conoce un ser completo en sí mismo sin la fantasía de sus propios colores, por favor avise! Creo que pocos o incluso, me atrevo a decir que nadie, posee la magia en sí mismo, sin otorgar el sello de divinidad en los demás. Los dioses creen que todo es perfecto en su punto de vista. ¿Creemos esa historia?.
Corremos senderos, eso es claro, en realidad sin poder elegir. La vida elige por nosotros. ¿Escape?. No lo creo, cuando es uno mismo quien hace un nudo a todo el circo, las manadas comienzan a pensar en sus propios privilegios. Entonces sólo quedas en el abismo cruel de tus propios caminos. Lames las botas de quien ha hecho algo por ti. Cuando todo es incierto. ¿Por qué sublivarnos a la vida en su esplendor?. Es cuando vemos mas claro. Cuando una dificultad está próxima. Cuando estamos entre la espada y la pared, es cuando lo mejor que hay en tí irredento exclama!:- Vuela, ¡sólo vuela!.
He visto la salida de este laberinto, sólo unas pocas luces lo marcan, ¿Cuánto estamos dispuestos a regalar? Aunque sea ese milagro que es la vida. ¿Cuánto estamos dispuestos a regalar?

G. F. Degraaff